La Joya
La Joya es riqueza
La Joya es belleza
La Joya es realeza
Pero para chicas como Violet, la Joya no es más que sumisión.
Ella nació y creció en el Pantano. Durante años, la entrenaron para cumplir con un solo objetivo: servir a la realeza. Pero una realidad brutal y violenta se oculta detrás de la brillante fachada de la Joya.
Allí, Violet conocerá qué tan lejos puede llegar una persona con tal de obtener poder. Pero, lo que es aún peor, se dará cuenta de que las vidas de las jóvenes como ella valen menos de lo que jamás imaginó.
Ahora debe encontrar una manera de sobrevivir, de escapar de ese futuro para el que tanto la prepararon, antes de que sea demasiado tardeā¦
En esta distopia, el país está dividido en sectores. Los sectores más pobres deben servir a La Joya, el sector más rico donde viven todos los Duques y el Exetor. Aquí, las jóvenes de los sectores pobres son analizadas e internadas después de cierta edad para convertirse en sustitutas y poder ayudar a que las familias adineradas sigan su legado. Así es como conocemos a Violet, una chica que está preparándose para empezar su camino rumbo a la subasta y convertirse en sustituta.
A lo largo de la historia nos van introduciendo a las diferentes costumbres y tradiciones que hay en esta sociedad. A mi parecer, entre más sabes al respecto, menos quieres saber porque todo es demasiado horrible para ser verdad. Es un mundo demasiado individualista y ajeno al dolor del otro de una manera muy cínica.
La historia está contada en primera persona, y así cómo nosotros vamos conociendo el funcionamiento de La Joya, la protagonista, Violet, también. En cuanto a la división de sectores, que la protagonista es muy amiga de la persona que la ayudó a prepararse para La Subasta y el destino de las sustitutas, es muy similar a Hunger Games. Sí te gustó esta trilogía, probablemente te guste La Joya.
A mi parecer, la trama es muy buena y la idea de proponer una sociedad donde promuevan la sustitución como lo hacen en este libro, es fascinante. Sin embargo, la historia está dirigida a un público pre-adolescente de una manera muy obvia. La actitud de los personajes, los diálogos y la descripción de las escenas es muy poco creíble a veces o muy escasa para poder profundizar en la historia.
Si bién en verdad es un tema fascinante, se queda muy por encima de este y no logra atrapar al lector que espera más acción o misterio entre los involucrados. Disfruté muchísimo la primera mitad del libro y la leí muy rápido, pero sentí que se estancó porque ya no sucedía nada inesperado, además de que llegó el galán. Los diálogos entre los enamorados son muy tontos y tan poco creíbles...
Hay un diálogo, en la página 343, donde este chico le comenta qué es lo han hecho con él las madres de sus clientes. Y la chica en lugar de enojarse o sentir algo relacionado a la reprobación de lo que le han hecho al chico, ella decide que está bien por ella porque eso ya fue y eso no determina quién es él. Entonces el chico contesta a eso con un: "creo que te amo." ¿En serio? ¿Era el momento más apropiado para decir te amo? ¿O decides amar a alguien por su reacción ante un hecho así?
Me decepcionó mucho que la idea sea buena pero se quede tan corta y que los personajes sean tan pasivos ante hechos como los que viven. Quizás por ser el primer libro de una trilogía, es que es tan pasivo y sin nada que destacar. Quizás lo mejor venga en los próximos libros. Pero no me quedaré a esperar por un quizás.
En conclusión, La Joya es un libro que se queda muy corto ante una gran idea y que, a pesar de ser trilogía, no voy a continuar leyendo.
Con la colaboración de: VyR Editoras
Amy Ewing
Sobre la autora
Creció en las afueras de Boston, donde su madre, que era bibliotecaria, le transmitió su profundo amor por los libros a muy temprana edad.
En el 2000, se mudó a Nueva York para estudiar teatro, pero, desafortunadamente, su carrera como actriz no funcionó.
Amy tiene un máster en Creative Writing for Children, otorgado por The New School, en donde tuvo la suerte de conocer a un grupo de autores de ficción para jóvenes. Actualmente vive en Harlem.